Tengo tantas cosas de hacer tanto y al mismo tiempo no quiero hacer nada, estoy atrapada entre feroces fauces de gente que en su vacío pretende absorber estímulos que solamente alcanzan para construir la ilusión de que algo está sucediendo en sus inútiles existencias.
Es posible que sea solo el domingo, que el dominio sea.
No importa a donde corras al final no puedes escapar de la miseria, se repite todo eso que no deseas... das viajes sin querer, estás en las rocas, roncas.
Andar duele, quisiera quedarme detrás del telón y dormir, pero los murmullos del miedo me invade mientras unos feroces ojos me hacen sentirme más lejos del mundo, hemos sufrido una gran invasión.
He mirado tu cuerpo convulsionar en ese ser que no es y que añora ser, me pareció altamente incómodamente atractivo.
Grandes esperanzas, mi cuerpo desea borrar mi memoria... pero no se puede.
Todo lo que me rodea me da naúseas, me incomoda pensar, me incomoda no hacerlo... necesito nada.
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